EL ESTRÉS Y LA FALTA DE FELICIDAD
En los últimos tiempos los psicólogos hemos debido atender los problemas emocionales generados por la presencia de la pandemia. Si el incremento de actividad, en cuanto al tratamiento de casos de estrés y ansiedad, es claramente perceptible al nivel de una consulta de psicólogos en Oviedo como Vivat, la estadística a nivel nacional es reveladora. El aumento de problemas psicológicos y afecciones de nuestra salud emocional ha sido notable, asociado a los diferentes grados de incidencia de la pandemia y su evolución a lo largo del tiempo. El último Estudio acerca de Salud Emocional y Estilo de Vida elaborado por Aegon en colaboración con el Consejo General de Psicología de España es bastante elocuente. Y nos habla de la relación entre el estrés y la falta de felicidad.
Uno de los indicadores más reveladores es el estrés debido fundamentalmente a distintas situaciones laborales como los ERTEs o situaciones de desempleo generadas por la pandemia. Además del temor a contraer la enfermedad. Lo cierto es que según este informe, refieren haber padecido estrés en el último mes un promedio de 7 de cada 10 españoles. Y esto es mucho para una afección que cada vez se asoma de forma más y más recurrente a las consultas de los psicólogos.
Causas del estrés
Las causas del estrés son variadas. La incertidumbre laboral es fuente inequívoca de estrés para muchas personas. Para otras lo son las dificultades económicas derivadas de la pérdida de empleo, o la alta exigencia para muchos a la hora de desempeñar sus funciones laborales. O la presión añadida del riesgo de acabar perdiendo su empleo. A nivel emocional, el peaje a pagar es ineludible.
Desde el punto de vista psicológico el estrés es una reacción psicofísica a una situación externa. Pero, estadísticamente, comprobamos que el primer puesto en las causas percibidas como generadoras de estrés es el trabajo. Después, las tensiones familiares se presentan como la siguiente causa en importancia. Las relaciones con la familia directa, hijos, padres o pareja producen a menudo cuadros de estrés que afectan a nuestro equilibrio emocional. Aunque existen muchas otras causas
¿Somos una sociedad estresada?
Según el estudio citado, cerca del 90 % de las personas que han manifestado haber padecido situaciones de estrés últimamente sí considera que afecta a su salud. Cada vez son menos las personas que minimizan su importancia. Y ya pocos aceptan vivir con estrés como un inevitable efecto secundario de una situación externa como pueden ser las condiciones de trabajo o la existencia de un enfermo grave en la familia. Quienes padecen estrés saben lo que están sufriendo. Y que puede ser causa de su falta de felicidad, entendida como un límite a sus potencialidades. Sin embargo, en lugar de acudir a un psicólogo, buscar una terapia adecuada o abordar directamente la situación estresante para minimizarla o suprimirla, rehúyen abordar el problema. De hecho, más de un 40 % no toma medidas concretas para combatir el estrés.
Contactar con un buen gabinete psicológico puede ser el primer paso para abordar un tratamiento del estrés eficaz. Las personas estresadas pueden encontrar vías de alivio de muy diversas formas. Un camino para recuperar la senda hacia el equilibrio y la felicidad de una vida asentada en el bienestar emocional. Pero el primer paso siempre es tomar conciencia de la propia situación para tratar de ponerle remedio y buscar los modos de reducir el estrés. Si quieres que te ayudemos con un problema de estrés contacta con nosotros. No será en vano.
