CLAVES PARA TENER UNA RELACIÓN SANA

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Psicólogos en Oviedo.

Hoy en día, en el mundo en el que vivimos, cada vez más inconformista, surgen numerosos divorcios o separaciones de pareja cuyos motivos de ruptura pueden deberse a numerosos factores, que seguramente, podrían haberse evitado.

Por norma general, como psicólogos en Oviedo, sabemos que las parejas suelen ser bastante dinámicas, ya que las personas evolucionamos, así como nuestros intereses y pensamientos. Pero en muchas ocasiones se pueden volver estáticas.

Al comenzar una relación de pareja, no se piensa en la posibilidad de una futura ruptura puesto que nos sentimos felices y satisfechos. Sin embargo, cuando la pareja empieza a pasar por malas rachas y a tener dificultades, se crea un malestar por ambas partes que puede desencadenar la ruptura.

Lo normal es echarle la culpa al amor, apareciendo pensamientos como “no siento lo mismo que antes”, “no estoy tan enamorado…”

El amor por sí solo, no puede mantener una relación durante mucho tiempo. El amor no puede con todo. Claro que es un elemento muy importante, pero esta parte emocional no es la única que va a garantizar el éxito de la relación.

Sin embargo, la parte cognitiva, si hay que tenerla muy en cuenta. Compartir ideas y valores en ciertas áreas va a favorecer que no surjan conflictos o que al menos sean salvables. Otra de las partes a tener en cuenta es la conductual. La pareja debe realizar actividades en común que satisfagan a ambas partes disfrutando tiempo juntos.

Para salir de la rutina hay que realizar actividades que estimulen y consigan hacer cada día diferente. Esto aportará beneficios personales y de pareja que contribuirán al buen funcionamiento de la relación.

En ocasiones, es necesario hacer una parada en nuestra rutina diaria para reflexionar si la relación que estamos manteniendo es la que deseamos o por el contrario, estamos dentro de una relación tóxica que nos daña y destruye.

De forma constructiva, hay que decirle a tu pareja todas las mañanas que es lo que te gustaría que hiciera hoy por ti, de esta manera, le estas diciendo de otra forma algo que necesitas o que no hace.

A lo largo del día, darse un abrazo durante dos minutos ayudará a liberar endorfinas para sentirse mejor.

Para finalizar, comentar lo que te ha gustado y lo que no de tu pareja, como por ejemplo, lo guapo que iba hoy, la cena que ha preparado…

Algunas de las claves para mantener una relación sana son las siguientes:

Comunicación

Durante el inicio de la relación nos reservamos algunas ideas u opiniones por temor o vergüenza que a lo largo del tiempo desembocan en discusiones. Mantener un dialogo sin miedos en el que se propongan soluciones o puntos de vista es fundamental para la pareja.

Respeto y confianza

Pilar de cualquier relación. Gracias al respeto, entendemos mejor a la otra persona aunque no compartamos sus ideas, y evitamos decir palabras de las que luego nos arrepentiremos. Además, si tu pareja no te da ningún motivo para desconfiar de ella, no tienes por qué hacerlo.

Espacio

Principal motivo de numerosas discusiones. Hay que dejar respirar a la otra persona, no pretender hacer todo juntos o imponer determinadas tareas.

Creatividad

No caer en la rutina. Para mantener el interés, hay que realizar actividades ya sean aficiones o proyectos en común. Desde combinar los círculos sociales hasta hacer una renovación de aficiones a realizar juntos.

Adiós a la dependencia

Intentar poseer y dominar a la otra persona, creyendo una vida desgraciada sin ella es un hábito erróneo en una relación que debemos evitar. No se ha de tener dependencia de la otra persona, sino llevar una vida independiente haciendo otras cosas, quedando con diferentes personas, puesto que si no tienes nada de qué hablar con tu pareja, la comunicación se convierte en nula. El amor no es posesión.

En conclusión, como Psicólogos en Oviedo, te informamos de que para conseguir una buena relación de pareja, hay que intentar evitar las crisis y la comunicación negativa o tóxica, ya que puede convertirse en un hábito. Es fundamental, tener espacios individuales y espacios conjuntos, cada persona debe tener sus momentos de intimidad y sus secretos.